Catedral Vieja de Salamanca

Es la Catedral Vieja uno de los monumentos eminentes del arte románico, obra del siglo XII y XIII, con tintes góticos reflejando los cambios en los años finales de su construcción. Se construyó en honor a Santa María de la Sede.

Planteada y comenzada con arreglo a los cánones más puros de este estilo, representa la extrema gracilidad del pilar románico. Remata el conjunto la Torre del Gallo con sus dobles ventanas y sus fuertes nervios.

Destacan, en escultura, los sepulcros de los siglos XIV y XV y en la pintura, las decoraciones de los sepulcros y de la capilla de San Martín son un ejemplo muy puro del estilo del siglo XIII, de influencia francesa.

El Patio Chico (el lugar donde se unen las dos catedrales, en la fachada sur de la Catedral Nueva y muy cerca de la entrada a la Casa Lis) forma uno de los rincones más acogedores de Salamanca formado por ábsides semicirculares y con el cimborrio, llamado por la forma de su veleta “Torre del Gallo”, derivada de influencias bizantinas y arquitanas. Ver los eventos que tendrán lugar en el Patio Chico.

Cuenta con un retablo del S. XV de 53 pinturas, la mayoría de Daniel (Dello) Deli. Muestra diferentes pasajes del Nuevo Testamento para explicar al pueblo del S. XV (mayormente analfabeto), los pasajes de la vida Jesús y la Virgen María.

Las capillas interiores contienen tumbas de obispos y nobles medievales (algo que llama mucho la atención a los niños cuando la visitan con el cole). Capillas: de San Martín, Santa Bárbara y Santa Catalina.

Las Catedrales constituyen un Conjunto Histórico Artístico digno de contemplar con calma y disfrute.

Ieronimus: Las torres de la Catedral de Salamanca. Desde lo más alto se puede ver la ciudad al completo, incluido el patio de las Escuelas Mayores. ¿Quieres subir?